Inicio » Actualidad » Dispositivos móviles y notificaciones

A estas alturas es rarísimo, pero que muy raro que alguien no tenga un smartphone. Ya sea con más o menos capacidades, está claro que los smartphone llegaron pensados para que todo el mundo tenga su smartphone. Ya sea gente mayor o los chavales del cole.

Recuerdo hace unos años se hablaba de la fiebre de las apps. Sigue siendo algo importante y la verdad sigue gustando hacer apps para muchas cosas que en efecto resultan realmente cómodas. Pero esta semana puedo decir que he llegado a un punto de casi tirar el móvil por la ventana.

Las notificaciones de las apps, son terroríficas. Yo este lunes al llegar a casa vi la pantalla del móvil y las notificaciones no cabían… notificación de email, notificación de email del curro, notificación de Google play queriendo instalar cosas, notificación del tiempo, notificación de horarios y retrasos, notificaciones de Whatsapp y notificaciones de Discord.

Básicamente la pantalla de espera, si le daba a la fecha de mostrar todas las notificaciones quedaba completamente cubierta e incluso podía hacer scroll. Creo que es momento de pararse a pensar por que se envía una notificación al móvil o en que aplicaciones tenemos notificaciones. Muchas notificaciones son irrelevantes y ni te interesa y posiblemente una notificación de algo realmente importante te la pierdes por simplemente pulsar en «Borrar todo». Y por parte de las aplicaciones que se hacen también hay que tener mucho cuidado con esto… no nos gustaría que nuestras notificaciones en el teléfono móvil sean ignoradas y eliminadas, tras un «ya lo veré luego»; un luego que nunca jamás llega.

Creo que lo de las notificaciones, pasa un poco con el servicio de correo electrónico. Se vuelve otro tanto de lo mismo.

A estas alturas es rarísimo, pero que muy raro que alguien no tenga un smartphone. Ya sea con más o menos capacidades, está claro que los smartphone llegaron pensados para que todo el mundo tenga su smartphone. Ya sea gente mayor o los chavales del cole.

Recuerdo hace unos años se hablaba de la fiebre de las apps. Sigue siendo algo importante y la verdad sigue gustando hacer apps para muchas cosas que en efecto resultan realmente cómodas. Pero esta semana puedo decir que he llegado a un punto de casi tirar el móvil por la ventana.

Las notificaciones de las apps, son terroríficas. Yo este lunes al llegar a casa vi la pantalla del móvil y las notificaciones no cabían… notificación de email, notificación de email del curro, notificación de Google play queriendo instalar cosas, notificación del tiempo, notificación de horarios y retrasos, notificaciones de Whatsapp y notificaciones de Discord.

Básicamente la pantalla de espera, si le daba a la fecha de mostrar todas las notificaciones quedaba completamente cubierta e incluso podía hacer scroll. Creo que es momento de pararse a pensar por que se envía una notificación al móvil o en que aplicaciones tenemos notificaciones. Muchas notificaciones son irrelevantes y ni te interesa y posiblemente una notificación de algo realmente importante te la pierdes por simplemente pulsar en «Borrar todo». Y por parte de las aplicaciones que se hacen también hay que tener mucho cuidado con esto… no nos gustaría que nuestras notificaciones en el teléfono móvil sean ignoradas y eliminadas, tras un «ya lo veré luego»; un luego que nunca jamás llega.

Creo que lo de las notificaciones, pasa un poco con el servicio de correo electrónico. Se vuelve otro tanto de lo mismo.